Una joya en el Valle: Sallent de Gállego
La Villa de Sallent está situada a 1305 metros de altitud, donde se unen los cauces del Gállego y Aguas Limpias, resguardada junto a la mole de la peña Foratata, en la cola del embalse de Lanuza.
Se cita por primera vez en 1279, en la Edad Media era la población más grande del valle. Junto con Lanuza formaba parte de uno de los tres Quiñones del Valle de Tena. En los vicos se levantaron torres fortificadas (Torre de la Cárcel, Pellicer, Torre de los Martón, Palacio de Lanuza y Castiecho).
Tiene nobles edificios de piedra muchos de ellos con influencia pirenaica francesa, hay que destacar la iglesia de la Asunción de estilo gótico tardío, se edificó en el siglo XVI a expensas de don Juan de Lanuza, Justicia de Aragón y Virrey de Valencia, Cataluña y Sicilia, su retablo mayor plateresco es del siglo XVI. Hay que destacar también el puente del Paco de 1570. Sallent de Gállego destaca dentro de la historia aragonesa: dio 7 Obispos, 7 Virreyes y nueve justicias de Aragón oriundos de Lanuza.
Actualmente tiene 1.480 habitantes (incluidos los núcleos de Formigal, Sandiniés, Escarrilla, Tramacastilla y Lanuza), debido a que la estación de esquí de Formigal está separada de Sallent, su casco urbano no ha crecido mucho, manteniendo su encanto.
Sallent de Gállego es punto de arranque de bonitas excursiones, a los picos de Anayet, Midi d’Ossau, Musales, Balaitus, a los ibones de Respomuso, Anayet, Arriel y una larga lista que hacen las delicias de los amantes de la montaña y, por supuesto, para la práctica del esquí alpino en las estaciones de Formigal y Panticosa y de esquí de fondo en las del Balneario de Panticosa y de la Partacua.
La Foratata, un gran peñasco rocoso que se eleva sobre la villa, es el pico más emblemático del lugar. Otras de las cumbres importantes dentro del término municipal son Anayet, Tres Hombres, Arriel y Balaitous, alcanzando muchas de ellas los 3000 metros de altura. Estos paisajes ofrecen infinidad de posibilidades, especialmente la práctica de deportes de montaña y aventura. El municipio está atravesado, además, por la GR-11: una ruta de montaña que recorre la cordillera pirenaica desde el Mediterráneo hasta el Cantábrico. Mención especial merece también El Portalet, paso fronterizo entre España y Francia que pone en comunicación los valles de Tena y Ossau.