La tradición del Alto Gállego

En Huesca, cerca del Pirineo, se sitúa la comarca del Alto Gállego. Todos sus rincones destilan historia y tradición, desde monumentos megalíticos hasta los pueblos prácticamente abandonados por la despoblación de los años cincuenta y sesenta.

Grandes casonas con recias paredes de piedra y empinados tejados de pizarra conforman la arquitectura popular que da la bienvenida a los visitantes al Valle del Tena. Puentes medievales, romanos y fachadas con preciosas portadas talladas en piedra guardan secretos sobre las costumbres, tradiciones y la sociedad popular de la comarca. Visitar estos parajes da la sensación de viajar en el tiempo hacia el pasado, hacia la época de los caballeros y las doncellas, porque el tiempo parece parado en algún lugar mucho atrás.

En la zona existen varias actividades muy divertidas y adecuadas para familias. Los niños aprenderán a convivir con la naturaleza y a disfrutar de ella con respeto y cariño. Puede visitarse una granja y convertirse durante unas horas en un auténtico granjero: dar el biberón a los terneros, recoger los huevos de las gallinas, conocer a los cerdos y las ovejas, etc. ¡Una actividad que encantará a los más pequeños!

También se puede vivir un día completo como un pastor de ovejas y aprender esta forma de vida y profesión tan antigua, propia del medio rural. Junto a un pastor, se conoce al rebaño y se le guía a través de la naturaleza, una experiencia original como pastor de ovejas. Vivir como pastores es una experiencia sensorial para conocer en primera persona la cultura tradicional de la ganadería ovina, muy propia del terreno. ¡Y podrás probar un riquísimo ternasco a la abrasa!

¿A qué esperas para vivir una experiencia única junto a la familia?

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